Preguntas frecuentes

Para que los envases no ocupen tanto, les quitaremos el aire que queda dentro, una vez estén vacíos. Es muy fácil: los envases se compactan con solo aplastarlos.

No, no es obligatorio limpiar los envases. No obstante, se recomienda pasarlos por agua para limpiar los restos de comida y, así, no huelan.

En la guía Zer Non aparecen a donde hay que echar los residuos más comunes.

La fracción rechazo es solo una pequeña parte de los residuos generados en nuestros domicilios, algunos plásticos, los residuos recogidos con la escoba o la aspiradora, motas de polvo, hilo dental y alguna más de estas pequeñas cosas. En la guía Zer Non aparecen que es exactamente lo que hay que echar a la fracción rechazo.

En la sección sobre el garbigune de esta web se explica detalladamente que es lo que se puede y debe llevar al garbigune.

El tapón también se echa al contenedor de los envases, así que no es obligatorio quitarle. Pero si lo quitamos, estaremos ayudando al trabajo que hacen en la planta de reciclaje.

Si esta limpio, lo clasificamos como papel y cartón. Si es solo papel y esta sucio con materia orgánica, lo echaremos al cubo de la orgánica. Si esta sucio y/o es encerado/plastificado lo echaremos con el resto. Hay algunos, que se pueden diferenciar fácilmente el papel del plástico, así que los diferenciamos y echamos el papel al cubo azul y el plástico al amarillo.
Si tenemos la posibilidad de utilizar tupers, es la mejor solución ya que no creamos residuos.

Si se le puede quitar el papel fácilmente, se lo quitamos y lo clasificamos con papel y cartón. En cambio si esta difícil de quitar la etiqueta, ya se lo quitaran en la planta de reciclaje de vidrio.

Botes de yogur, botes de leche, botes de metal, tapas de plástico, botes de productos de limpieza…

No, el garbigune es un servicio gratuito.